En Madrid, magnífica exposición del estilo Art Déco francés de los años 20-35 en la Fundación Juan March, que podéis disfrutar hasta el 28 de junio. Extraordinarias piezas, materiales delicados: ébano, marfil, madreperla, piel de tiburón… de un estilo puramente estético, símbolo de exquisitez y glamour. Pinturas, mobiliario, arquitectura, esculturas, moda, joyas, perfumería… todo un trabajo artesanal. Una panorámica del lujo en la decoración de interiores de París de aquella época.
Henry Sauvage. Exposición Internacional de Artes Decorativas Modernas. París. Pavillon Primavera. 1925
Art Déco, un estilo que se caracteriza por la ornamentación, el lujo de los materiales, (mármol, granito y aluminio) y el predominio de formas rectilíneas, motivos geométricos y vegetales. Fue un estilo moderno, pero alternativo a la vanguardia. A menudo, interpretado como una reacción contra las tendencias curvilíneas del Art Nouveau o Modernismo.
La exposición bajo el título “El gusto moderno. Art déco en París, 1910-1935” es la primera muestra que se le dedica en España y también la primera en celebrarse fuera de un museo generalista o de artes decorativas. Esta exposición se enfoca desde otra perspectiva: defiende la inclusión del Art Déco en la historia del arte moderno.
Jan & Joël Martel. Maqueta del Árbol cubista para la Exposición Internacional de París 1925.
El proyecto ha contado con el profesor Tim Benton como comisario invitado y con la colaboración de Ghislaine Wood; ambos, responsables de la exposición Art Déco, 1910-1939, celebrada en el Victoria and Albert Museum en 2003.
Cuántas ganas tenía de visitar esta exposición y he de decir que me ha encantado, por este motivo, os la recomiendo. Son muchas las razones: por la extraordinaria calidad de las piezas, hechas a mano y bien elegidas, y la información que se facilita. Detrás de cada objeto existe una historia que no ha quedado en el olvido.
El Art Déco es un estilo propio de las artes decorativas (arquitectura, diseño de interiores, diseño gráfico e industrial) desarrollado en el periodo de entreguerras, entre 1920 y 1939, en Europa y América. Nació en París, tras el fin de la Primera Guerra Mundial y se prolongó hasta el Crack de la Bolsa de Wall Street de 1929, una de las mayores crisis jamás conocidas.
Charlotte Perriand. Silla Guéridon, c. 1927. Musée des Beaux-arts de la Ville de Reims
Esta exposición abarca desde los orígenes del Art Déco en París en 1920, pasando por su punto álgido entre 1925 y 1935 -gracias a la Exposición Internacional de Artes Decorativas de París de 1925- hasta su apagamiento una década después. Paso a paso, vemos y disfrutamos de la larga y constante evolución.
El Art Déco, ante todo, buscó la decoración y la forma ornamental por encima de la funcionalidad. Fue muy bien recibido por los artesanos, como los ebanistas, porque este estilo concebía los muebles como esculturas, no como simples objetos funcionales.
La muestra “El gusto moderno. Art déco en París, 1910-1935” se organiza en ocho secciones, según cronología y temática. Más de 350 piezas de pintura, escultura, mobiliario, moda, joyería, perfumería, cine, arquitectura, vidrio, cerámica, laca y orfebrería, además de tejidos, encuadernaciones, fotografías, dibujos, planos, maquetas, carteles publicitarios y revistas procedentes de más de 50 colecciones públicas y privadas de Europa y Estados Unidos. Una oportunidad única para conocer con mayor profundidad el Art Déco francés.
Obras valiosas de autores célebres o desconocidos para el gran público.
Impresionante Biombo lacado de madera con dorado de Armand Albert Rateau decorador, ebanista y escultor francés. Museo de Ates Decorativas de París. Este biombo estuvo en el Palacio de Liria en Madrid de la Casa de Alba, antes de ser subastado.
Asimismo, la muestra reúne a más de 122 artistas, artistas-decoradores, diseñadores, couturiers, interioristas, arquitectos, artesanos o ensembliers.
El término Art Déco abarca un amplio abanico de especialidades del arte y la artesanía, las cuales se dieron cita en la Exposition Internationale de Arts Décoratifs et Industriels Modernes de 1925 y que, posteriormente se conmemoró con una retrospectiva celebrada en París, el 16 marzo de 1966, bajo el título “Les Annes 25”, en el Musée des Arts Décoratifs; fue en esta última fecha cuando el conjunto de artes decorativas se bautizó como Art Déco.
Vamos a detenernos ahora en el año 1925: el corazón del Art Déco.
Después de la Exposición Universal de 1900 en París, artistas franceses, como Guimard, Grasset, Lachenal, Follot, Dufrene y Decour, formaron un colectivo dedicado a las artes decorativas de vanguardia, quienes se hacían llamar “los modernos”. En 1925, organizaron la Exposition Internationale des Arts Décoratifs et Industriels Modernes, también en París.
La iniciativa del gobierno francés de celebrar la Exposición de 1925 –en principio programada para 1916– con el fin de restablecer la primacía internacional de los productos de la industria francesa del lujo, supuso un fuerte impulso para el Art Déco. Este estilo se extendió por todo el mundo para competir con el diseño alemán.
Además, esta exposición tiene una sección con la Exposición Colonial de 1931 en París, donde se muestra la presencia de lo exótico en el Art Déco
El Art Déco fue una mezcla de estilos e influencias. Vemos la influencia de otras culturas como la azteca, maya e inca y de países como Egipto, Mesopotamia África, México, Japón o China. Sin olvidarnos del influjo pictórico de las primeras vanguardias, especialmente, el cubismo.
Un claro ejemplo de ello: el proyecto La Maison cubiste, presentado en el Salón de Otoño de París de 1912, que constaba de una fachada a tamaño natural diseñada por el escultor francés Raymond Duchamp-Villon.
Pese a la diversidad de fuentes, el Art Déco se le puede reconocer cierta conexión. Algunos de los elementos comunes son: uso de materiales exquisitos, la amplificación del detalle, formas geométricas (el cubo, la esfera y la línea recta); representación faunística, haciendo referencia a la velocidad, (gacelas, galgos, panteras palomas)… así como adornos fitomorfos (flores, cactus o palmeras).
En París, sus principales consumidores fueron las mujeres jóvenes de clase alta amantes de la moda y los couturiers que trabajaban para ellas, véase los espectaculares apartamentos del diseñador de modas y coleccionista de arte Jacques Doucet o Jeanne Lanvin.
Me ha llamado la atención la sección dedicada al mundo de la moda, con diseños realizados por Coco Chanel, Jeanne Lanvin o Paul Poiret.
El modisto Paul Poiret liberó del corsé el cuerpo de la mujer. Las mujeres llevaban una moda más atrevida, con el pelo corto a la «garzón», fumaban y participaban en cócteles -que estaban muy de moda en los años 20- que nos muestran su liberación de ataduras. Tiempo de diversión. Vestidos cortos e insinuantes, pero recargados, plumas, flecos, lentejuelas, brillos… lujo también en los accesorios.
En cuanto a la moda del vestir, el Art Déco dejó su impronta en diseños de Madeleine Vionnet o de Jeanne Lanvin. Vionnet, con vestidos inspirados en el arte egipcio, creados el mismo año en que se descubre la tumba de Tutankamón en Egipto, y Lanvin con bordados de motivos aztecas y orientales, además de sus trabajos de decoración de interiores Art Déco.
Sobre estas líneas, la influencia oriental se aprecia en este espectacular vestido llamado «Chimère«, realizado por la diseñadora Jeanne Paquin, 1925. Seda azul y oro bordado con motivos de dragones chinos. Aplicaciones de perlas y abalorios.
En la fotografía de abajo, un diseño de Coco Chanel.
El modista Paul Poiret y su esposa retratados por el pintor e ilustrador déco vallisoletano Eduardo García Benito, 1921. Colección Fontaneda Berthel.
En los años 20, la aparición de Coco Chanel, constituyó un cambio radical en la sociedad, no solo porque influyó directamente en la manera de pensar, sentir, vestir y actuar de las mujeres. Las mujeres estaban cansadas de los corsés y de sombreros con adornos inútiles, necesitaban un cambio que les permitiera “libertad de movimiento” y Coco Chanel supo darles una respuesta magistral.
En este sentido, los diseños de Chanel y Jean Patou iban al compás de la nueva actitud de la mujer moderna: libre y desenvuelta.
Fascinante, también, la sección dedicada a joyas con diseños de Cartier y Raymond Templier.
El Art Déco se apodera de los frascos para perfumes.
El transporte fue sumamente importante en aquella época.
En 1935 el Art Déco se fue apagando. Casi dos décadas después, sus formas entrelazadas y sinuosas producían hartazgo por su gran complejidad, por lo que los diseñadores de modas, decoradores, ilustradores, ebanistas, joyeros y artesanos en general preferían las líneas puras y las superficies llanas, influenciados por escuelas y movimientos artísticos de vanguardia.
En la segunda fase del Art Déco, un grupo de jóvenes artistas empezó a utilizar otros materiales como el acero y cromo tubular, inspirados por el movimiento moderno que, desarrollado en Holanda y Alemania, en Francia representaba Le Corbusier, el principal antagonista del Art Déco ya antes de 1925. Les caracteriza una estética sobria y sencilla. Otra forma de pensar.
Para finalizar, comentar que el Art Déco, con el tiempo, da un paso de gigante hacia el Modern Jazz y el «Streamline» del diseño industrial norteamericano (estilo aerodinámico) que se impuso entre los años 30 y 50 en todo el mundo.
Una exposición, a mi gusto, exquisita, ¡¡que no os podéis perder!!. Un repaso al estilo Art Déco durante décadas que ofrece una amplia visión del mismo. Hasta el 28 de junio en la Fundación Juan March en Madrid. Asimismo, se puede adquirir un catálogo, en castellano e inglés, con una descripción y reproducción de todas las obras expuestas.