Desde las alturas de una sierra montañosa cerramos el año 2018 con un post de una de las localidades más bellas de España que hechiza por su luz y magia: Ronda. Un pueblo de Málaga que ha enamorado e influido a ilustres poetas, como Rainer María Rilke, escritores de la talla de Ernest Hemingway o el reconocido cineasta Orson Welles.
Un pueblo andaluz que ha sido todo un hallazgo y forma parte de mi trilogía por mis cinco años de blog. Ver anteriores post: Málaga y Marbella.
Os voy a mostrar algunos de los tesoros que tiene Ronda: su historia y arte milenario, sus vistas panorámicas del profundo desfiladero, llamado el Tajo de Ronda, sus montañas y el Puente Nuevo. Por todas sus joyas, Ronda ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Podría estar reconocido como uno de los pueblos más bonitos de España, dentro de la Asociación de «Los Pueblos más bonitos de España», pero los pueblos que integran esta red no pueden exceder los 15.000 habitantes y Ronda cuenta con más de 34.000. En 2019, entran 11 pueblos más: De 68, en 2018, con la nueva numeración, pasarían a ser 79 pueblos más bonitos de España.
La Plaza de Toros de Ronda es una de las más antiguas de España. Una ciudad con huella taurina en la que se celebra anualmente la Corrida Goyesca, actualmente, a cargo de los hermanos Rivera, Francisco y Cayetano, hijos del fallecido torero Francisco Rivera Paquirri y Carmen Ordóñez. El abuelo de ambos hermanos, Antonio Ordóñez, natural de Ronda, fue el impulsor de esta tradición, creada en 1954, por su padre, Cayetano Ordóñez, conocido como ‘El niño de la Palma’ y, también, rondeño.
Las esculturas del cineasta Orson Welles y el escritor Ernest Hemingway presiden la entrada del Paseo Blas Infante, junto a la Plaza de Toros de Ronda; ambos fueron amigos del diestro Antonio Ordóñez, aficionados a los toros y asiduos en este coso taurino allá en los años 50.
Las cenizas del director de cine Orson Welles descansan en la finca «Recreo de San Cayetano», que era propiedad del fallecido ex matador de toros Antonio Ordóñez, en Ronda; ahora pertenece a los hermanos Rivera Ordóñez. Además, el cineasta tiene su propio Paseo, ubicado a espaldas de la plaza de toros rondeña.
Momento de reflexión: No soy ni taurina ni antitaurina, es decir, si no me gustan los toros pues no acudo a la plaza y punto. Ni monárquica ni republicana, ni a favor de una ni de otra, acato y respeto lo que dice la Constitución Española, aunque haya cosas que no me gusten. No soy ni de derechas ni de izquierdas, soy de centro-centro y pa´ dentro, ya que en política me posiciono en la moderación, y así seguiría diciendo muchas cosas más. Para mí, el único Rey de Reyes se llama Jesucristo al que sigo por educación y convicción. Y lo nombro porque en estas fechas estamos en Navidades y «ronda» en mi cabecita.
Toros, política y religión, ¡qué peligro hablar de estos temas!. Si hasta, cuando vivía mi madre, ciertas amigas falsas y frías criticaban que tuviera una buena relación con ella y que fuera mi mejor amiga. Decían que yo iba a entrar en depresión cuando falleciese. ¿Será que ellas tienen mala relación con su madre y tienen celos estúpidos?… Ya no hay respeto a la libertad política, ni religiosa ni siquiera individual ni personal. Todo puede resultar molesto, hasta que te lleves bien con tu madre.
A lo que íbamos, tras el lapus reflexivo, marca personal de mis posts, Ronda tiene, además de su iglesia, castillo, conventos y palacios, un espectacular desfiladero o garganta, de más de 100 metros de profundidad cuyas inmejorables vistas desde los distintos Miradores producen un vértigo tan grande que lo único que puedes hacer es desafiarlo.
Como veis en las fotos, es un pueblo lleno de historia y tradiciones que hay que callejear e incluso puedes hacer senderismo y disfrutar de la Naturaleza por distintas rutas.
En otoño de 2018, Ronda fue devastada por las inundaciones torrenciales que han asolado algunas regiones de España, especialmente, a Málaga. Los Baños Árabes de Ronda sufrieron las consecuencias de las impresionantes precipitaciones aunque los daños fueron menores de los estimados en un principio. Son los mejores conservados de España y se han salvado, afortunadamente, de las repentinas inundaciones. La Naturaleza, por un lado, es sabia, pero, por otro, es devastadora, caprichosa e imprevisible.
Ronda, una ciudad, cuyo casco viejo nos traslada a otra época en la que se construyó el impresionante Puente Nuevo, sobre el río Guadalevín a su paso por el Tajo, llamado con este término, pero tiene casi 230 años de historia. Un pueblo típico andaluz con sus calles blancas decoradas con ventanas enrejadas y con curiosos museos, como el Lara, Del Bandolero, de Rilke o del vino.
La artesanía tiene una larga tradición en la Serranía de Ronda y ofrece un amplio abanico de actividades que van desde la talla de la madera, la cerámica, la forja, el cuero, el corcho, el esparto, la caña, etc.
Preciosas prendas de piel, chaquetas, cinturones o bolsos con precios de fábrica
Son muchos los encantos que convierten a Ronda en un referente turístico en todo el mundo.
Uno de los platos más solicitados es el rabo de toro, un plato saludable y muy rico que os recomiendo degustar si visitáis Ronda. Las setas son también otra propuesta culinaria y destaca, sobre todo, la carne de caza, como la perdiz y la codorniz. De hecho, existe un Museo de Caza en la ciudad con un servicio de organización de cacerías. Y esto y mucho más es lo que ofrece la gastronomía de la localidad.
A Ronda se puede ir a pasear, comer, comprar, relajarse, y sobre todo, a soñar por su historia, tradiciones, gastronomía, artesanía, belleza natural… Una de los pueblos más atractivos de España.
Un pack irresistible: Málaga, Marbella y Ronda. Algo más que sol y playa, se trata de un destino turístico cultural lleno de sorpresas. ¿A quién no le gusta esta palabra?… Aprovecho este post para felicitaros el 2019 y desearos que en el nuevo año las rutinas se conviertan en sorpresas. ¡Feliz y Bienvenido 2019!