En la tienda de Dolores Promesas en la calle Claudio Coello, nº 69, en Madrid
Este post es muy especial porque es el último del año 2014. Mi proyecto empezó hace un año y cuatro meses lleno de energía y de ilusiones. Ante todo, gracias a todos los que me habéis apoyado desde el principio, a todos los que os habéis ido incorporando y, por supuesto, a todos los que me seguís incondicionalmente.
Voy a despedir el año y desear todo lo mejor para el que entra, 2015, un año que PROMETE, con una firma que admiro, DOLORES PROMESAS. A finales del mes de octubre de 2014 abrió su primera tienda en el extranjero, concretamente en París. Y esto es para celebrarlo.
Una marca que arrancó con el nombre de un personaje ficticio, Dolores Promesas, y que tiene una bonita historia que contar llena de sueños e ilusión. Dolores tiene un pasado doloroso, de ahí su nombre, es un resumen de todo lo que sufrió en el pasado; y Promesas, su apellido, hace honor a su futuro, lleno de esperanza, porque ella promete volver a ser feliz y que las únicas lágrimas que corran su rímel sean de alegría.
“Puedo prometer y Prometo que no habrá más Dolores en mi vida”, toda una declaración de principios, es el punto de partida de esta marca. El amor y el desamor, dos pilares fundamentales en su vida, y su sueño: “ser diseñadora de moda” que al final cumplirá.
Las mascotas de este entrañable personaje, Dolores Promesas, son su perrita Tula y la gata Trini, ésta última de su mejor amiga, Pepa. También, en su vida están presentes muchos recuerdos, como la mercería que regentaban sus abuelos en un pueblecito costero de Cádiz -donde fue feliz rodeada de hilos, botones, madejas de lana y también vendían ropa-, hasta que se fue desde Andalucía a Madrid.
“La felicidad se puede encontrar en cualquier sitio con la condición de que no la busquemos”. Una frase que he escuchado recientemente y me ha gustado mucho.
Detrás de la marca virtual Dolores Promesas hay dos mujeres y un hombre: Alicia Hernández y Myriam Pintado, diseñadoras, y Javier Lapeña, director general. Alicia Hernández también es la directora creativa del grupo. Una suma de talentos creativos y algo más.
Sus inicios se remontan a 2005 con unos diseños de unas camisetas con frases que tocan el corazón. “No soy tu Princesa”, “No tengo desperdicio”, “Si tú me dices Ven”, “Pisa con garbo”… son algunos de los lemas. Desde entonces han lanzado accesorios, bolsos, bisutería, zapatos, papelería y fundas para iPhone e iPad. Todo ello con diseños originales y con un estilo desenfado y juvenil, cosechando un tremendo éxito a nivel nacional.
Los hombres de Dolores Promesas aman y prometen ser fieles, que no es un privilegio exclusivo de la mujer
En Dolores Promesas hay un concepto claro: comunicarse con los clientes con una historia y con una decoración para hacernos soñar. Apuestan por una decoración con toque retro-vintage: Papeles personalizados, muchos detalles en la decoración, muebles decapados provenzales, espejos con marcos dorados…
Una marca que avanza con paso firme, como botón de muestra su línea Premium, llamada Heaven, para hombre y mujer.
Su ropa la llevan muchas celebrities, como Paula Echevarría, muy valorada como bloguera. Repite con frecuencia con esta marca en eventos de moda y lo que ella se pone se agota enseguida. Es amiga y cliente y se fue hasta París para la inauguración de la tienda, en el numero 91 de la rue Seine del distrito número 6, en el barrio de Saint-Germain-des-Prés.
Paula Echevarría con un vestido de la colección Heaven. Fotografía de Dolores Promesas
Dolores Promesas está trabajando también para crecer a nivel internacional a través de ‘Master Franquicias’ en países como México, Colombia y Oriente Medio.
Hasta la fecha, posee 22 tiendas en España, de las cuales siete son propias, una de ellas en Las Rozas Village (Madrid), y el resto, 15, son asociadas.
Hemos visto con Dolores Promesas que Esfuerzo + Magia = Éxito. Mi deseo es que en 2015 obtengamos los frutos de lo sembrado el año anterior y que un montón de sueños se hagan realidad.
En la tienda de Dolores Promesas en Murcia, en la calle San Bartolomé, nº 2
Los lunares nunca pueden faltar en los estampados de Dolores Promesas
Una pamela de fieltro de Dolores Promesas, una apuesta segura
Bolsos metalizados en color plata y oro, un complemento perfecto para estas fiestas
Escaparate de la tienda de Dolores Promesas en Murcia, C/San Bartolomé, 2
Me he ido a la numerología y el número 5 significa fortuna, el 15 es un número artístico, y si nos regimos por el estudio numerológico, es decir, si sumamos los dígitos que comprenden el año 2015 (2+0+1+5 = 8), este 2015 no es un 15 sino un 8. ¡¡Eureka!! mi número favorito.
El número 8 enmarca una trayectoria profesional y económica ascendente rápida y el 2015 es un año que va a ofrecer oportunidades a nivel laboral.
¡¡Qué salud, trabajo y amor jamás nos falten!!. Deseos y promesas para el próximo año, pero no soy Dolores Promesas, ¿eh?…
¡¡¡Feliz 2015 a todos!!!